Definir a dónde quieres ir establece un objetivo por el que trabajar. Mucha gente habla vagamente de viajar, pero nunca dicen a dónde van, solo que van a ir. Elegir un destino es muy importante, ya que te da un objetivo definido.

Es mucho más fácil mentalizarse con «me voy a Venecia la próxima primavera» que con «quiero conocer algo de Italia» o «tengo ganas de hacer un viaje». No solo su viaje será más concreto y más fácil de comprometerse, sino que también hará que la planificación sea más fácil… porque sabrás en qué debes trabajar.

Concreta tus planes. Sea detallado. Cuanto más centrado y concreto sea tu objetivo, más fácil será alcanzarlo.

Una de las preguntas más frecuentes antes de planificar un viaje es «¿cuánto cuesta viajar?» Y la mejor respuesta es «Eso depende».

Y esto es porque hay que tener en cuenta varios factores para determinar el importe del viaje como, por ejemplo, la duración del viaje.

Para saber cuánto tienes que ahorrar, tienes que conocer la duración de tu viaje.

¿Vas a estar una semana? ¿Un mes? ¿Un año?

La duración de tu viaje es un factor importante para determinar cuánto dinero necesitas. Dedica algún tiempo a reflexionar sobre ello hasta que tomes una decisión al respecto.

Por ejemplo, después de decir «me voy a Venecia la próxima primavera», añade «durante X días». Así podrás empezar a reducir la cantidad de dinero que vas a necesitar para ahorrar. «Voy a ir a Venecia durante 10 días» es un viaje que puedes planificar. Es un objetivo alcanzable.

Una de las decisiones más importantes que tendrás que tomar es si vas a viajar solo o acompañado. Ambas opciones son estupendas, pero también son opciones muy diferentes.

Viajar solo te da la libertad de ir a donde quieras. No hay que hacer concesiones. Solo tienes que ir a donde te lleve el viento. Sin embargo, significa que tienes que hacer toda la planificación tú mismo, lo que puede parecer desalentador si eres nuevo en la planificación de viajes.

Si quieres conocer los mejores destinos para viajar solo, no dejes de leer este artículo.

Viajar con alguien significa que tienes a alguien que te ayuda a planificar el viaje. De este modo, la búsqueda de su itinerario será más rápida y tendrás a alguien con quien disfrutar del destino. Sin embargo, también significa que a veces tendrás que hacer concesiones. Quizá en las comidas, las actividades o el alojamiento. Todo dependerá de ti y de la persona con la que viajes.

A fin de cuentas, no hay una respuesta equivocada.

Así que… ¿qué va a ser este viaje? ¿solo o con alguien?

Ya sabes a dónde vas y cuánto tiempo vas a estar allí y también con quién compartirás el viaje, pero para saber realmente cuánto dinero necesitas, tu siguiente tarea es investigar los costes en tu destino según el estilo de viaje que quieres.

¿Quieres ir de mochilero, o eres más de alojarte en hoteles de lujo?

¿Cuánto cuestan los albergues, los hoteles, los restaurantes y las atracciones?

Saberlo te permitirá calcular cuánto dinero necesitarás para tu viaje. A continuación te damos algunas ideas sobre cómo investigar los costes:

• Compra una guía de viajes.
• Consulta distintos blogs especializados.
• Pregunta en sitios web comunitarios relativos a viajeros.
• Busca en Google los precios de cosas específicas que quieras hacer, como el buceo, el salto en bungee, las visitas a bodegas, etc.
• O, más fácil, contacta con tu agencia especializada en viajes desde donde podrán darte estos datos y todos los que necesites.

No necesitas hacer más que eso.

Antes de empezar a ahorrar, tienes que saber cuánto tienes y cuánto gastas. Empieza a anotar todos tus gastos actuales para poder determinar en qué estás gastando dinero, y cómo puedes reducirlo.

Piensa que normalmente gastamos mucho dinero cada día en pequeñas compras: un café aquí, un bocadillo allí. Todo eso se va acumulando. Para cambiar tus hábitos de gasto, primero tiene que conocerlos. Hacer una lista te servirá para eso. También te permitirá ver tus necesidades financieras con mayor perspectiva.

Por ejemplo, si necesitas 2.000€ para el viaje que vas a hacer dentro de ocho meses, eso significa que solo tienes que ahorrar 8,33€ al día. ¿No crees que así es mucho más fácil encontrar una manera de ahorrar 8 euros al día?

Por cierto, ¡con el café diario ya tienes la mayor parte hecha!

Mientras trabajas para ahorrar dinero, obtén una tarjeta de crédito de viajes para poder ganar bonificaciones y canjear millas y puntos por vuelos y estancias de hotel gratis. La acumulación de puntos y millas de las tarjetas de crédito para viajes es la forma en que podrás obtener algunos vuelos y estancias de hotel gratuitas o, como mínimo, interesantes descuentos.

Si quieres un vuelo gratis, inscríbete en las tarjetas que te ayuden a conseguirlo. Si quiere habitaciones de hotel gratis, consiga una tarjeta de hotel. En cualquier caso, contrata una tarjeta de crédito para viajes y empiece a ganar puntos hoy mismo. Siempre que puedas pagar su saldo mensual, obtendrás crédito para viajes gratis.

Algunas interesantes son la Iberia Card o la Amex Gold.

Tampoco es necesario que contrates muchas tarjetas; elige una o dos y céntrate en ellas. Hazlo en el momento en que decidas que quieres viajar. No esperes: esperar equivale a perder puntos, lo que significa menos descuentos en tus viajes.

Acumular puntos y millas (lo que se llama «travel hacking») es lo que hacen todos los expertos para reducir sus costes y viajar más tiempo. Es lo que ha mantenido mis costes bajos y a mí en la carretera durante tantos años. Aunque las mejores tarjetas sólo están disponibles en EE.UU., todavía hay muchas opciones para los canadienses, así como para la gente de Europa, Australia y Nueva Zelanda.

Mientras te acercas a tu objetivo, asegúrate de seguir alimentando tu deseo de viajar.

La planificación de un viaje puede ser agotadora y abrumadora, especialmente si no cuentas con el apoyo de tus amigos y familiares (y sobre todo si aún faltan meses para el viaje). A menudo puede resultar desalentador y parecer inalcanzable.

Por eso te recomendamos que te mantengas inspirado y leas guías de viaje, blogs especializados en tu destino, fotos y opiniones de otros viajeros.

Bien, ya estás inspirado, preparado y has empezado aaa ahorrar dinero para tu viaje.

Pero antes de comprar ese vuelo o reservar ese hotel, comprueba si hay ofertas que podrías haber pasado por alto. Puede que sueñes con Venecia, pero tal vez haya grandes ofertas para Berlín ahora mismo. O tal vez puedas conseguir un crucero de siete días con un 70% de descuento, un paquete a Hawai por el precio de su vuelo a París, o un 50% de descuento en viajes en barco por Grecia.

Vamos, que le eches un vistazo a las ofertas de última hora, Tu agente de viajes seguro que tiene un montón de ofertas con las que sorprenderte.

Una vez que hayas utilizado tu tarjeta de crédito para viajes y hayas recibido tu bonificación por inscripción, utiliza tus puntos para reservar tu vuelo.

Asegúrate de reservar con antelación para conseguir el vuelo deseado.

Afortunadamente, todavía hay muchas maneras de evitar ser la persona del vuelo que ha pagado más por su billete. Tu agente de viajes hará la mejor búsqueda de vuelos baratos para ti, pero si quieres ser tú mismo quien haga esa búsqueda, algunos sitios para encontrar billetes de avión baratos son:

• Skyscanner, web que te permite buscar varios destinos al mismo tiempo.
• Momondo, una gran plataforma para encontrar vuelos realmente baratos.
• Google Flights, al igual que Skyscanner, Google Flights es excelente para realizar búsquedas abiertas a múltiples destinos.
• Kiwi, es ideal para encontrar rutas menos conocidas o compañías aéreas más pequeñas.

Si viajas por menos de dos semanas y tienes un calendario definido, no dudes en reservar el alojamiento para la total duración de tu viaje si te da tranquilidad (o si estás de visita durante la temporada alta).

Para viajes de más de dos semanas (o si vas a viajar a largo plazo) reserva solo los primeros días. Así te asegurará de tener un lugar al que acudir a tu llegada. Una vez allí, el personal del hotel/albergue y otros viajeros te darán consejos de primera mano. A partir de ahí, podrás utilizar esa información para planificar tus próximos pasos.

Aunque puedes reservar más que tus primeras noches, es posible que acabes queriendo cambiar tus planes una vez que hayas aterrizado.

Aquí sí que te recomendamos que te dejes aconsejar, sin ningún lugar a dudas, por la experiencia y los conocimientos de tu agente de viaje de confianza. No solo te ayudará a seleccionar el alojamiento más adecuado de acuerdo con tus gustos y presupuesto, sino que te dará indicación de cuáles están mejor situados, tienen un mejor servicio y sus instalaciones son más modernas y confortables.

Seguro que no te gustaría planificar el viaje al detalle y que finalmente tu alojamiento acabe siendo poco menos que un cuchitril situado muy en las afueras.

Algunas grandes cadenas hoteleras tienen su propia tarjeta de crédito o programa de puntos que te permitirá disfrutar de bonificaciones de bienvenida, descuentos o servicios especiales.

Para asegurarte de que has presupuestado correctamente, haz un resumen de las principales actividades que quieres disfrutar durante tu viaje y de su coste. Haz cualquier ajuste de última hora en tus ahorros para asegurarte de que tienes suficiente dinero. Esto también te ayudará a averiguar si necesitas alguna reserva para las excursiones o actividades que has elegido.

Busca también descuentos en Internet. Mientras que algunos países ofrecen precios más baratos en persona, otros dan descuentos a los que reservan con antelación o en línea. Investiga cuál es el que corresponde a tu itinerario para poder ahorrar dinero.

Para viajes más cortos, también puede reservar tus actividades con antelación para asegurarse de conseguir entradas. Para viajes más largos, puedes permitirte reservar sobre la marcha.

Además, antes de salir de casa, ten una idea aproximada de qué actividades son prioritarias para ti. Así, si te quedas sin tiempo o sin dinero, podrás centrarte en las actividades más importantes para no perderte nada. Además, asegúrate de que no hay vacaciones, cierres u otros obstáculos que te impidan realizar ciertas actividades.

Independientemente del tiempo que vayas a estar fuera, es una buena idea informar a las compañías de tus tarjetas de crédito de que va a estar en el extranjero; de este modo, las transacciones que realice no se marcarán como fraudulentas y será menos probable que tu tarjeta sea bloqueada. No hay nada peor que tener que estar al teléfono con la compañía de la tarjeta de crédito en lugar de disfrutar de las vacaciones.

Además, asegúrate de llevar varias tarjetas de crédito y débito. De este modo, si una de ellas se bloquea, se pierde o te la roban, no te quedarás en la estacada.

Hoy en día se puede operar con la tarjetas habituales en casi cualquier lugar del mundo, pero no está de más que si tu destino no es de los más habituales consultes las formas de pago más efectivas allí.

Es hora de hacer la maleta para el viaje. Puede ser tentador querer llevar todo «por si acaso», pero cuando se trata de viajar, menos es más. No necesitas 5 jerséis ni 8 pares de zapatos. Puedes arreglártelas con menos. ¡De hecho, es bastante liberador una vez que te acostumbras!

A menos que vayas a viajar a varios climas y necesites un equipo de invierno voluminoso, no necesitas una enorme maleta llena hasta arriba.

Aquí podrás averiguar qué debes meter en la maleta mínima viable.

Aunque lo que lleves en la maleta dependerá del lugar al que vayas, recuerda que no es necesario que lleves todo lo que tienes. Puedes comprar las cosas que necesites en el camino. Puedes lavar la ropa en el extranjero. Al fin y al cabo, tienes que cargar con todo lo que llevas. Así que lleve menos.

Sin embargo, hay algunas cosas extra que puedes llevar más allá de tu ropa de diario. Algunas cosas que debes plantearte llevar son:

• Botiquín de primeros auxilios
• Botella de agua reutilizable
• Filtro de agua
• Cubos de embalaje (para mantener tu equipaje organizado)
• Candado de viaje (para las taquillas de los albergues)
• Adaptador de viaje
• Toalla de secado rápido

Además, asegúrate de llevar cualquier receta médica para tener suficiente para la duración de tu viaje. Si no es posible, lleva una nota del médico y la receta para poder surtirla en el extranjero.

Aunque mucha gente piensa: «Estoy sano, no necesito un seguro de viaje. No voy a enfermar», el seguro de viaje es mucho más que una simple protección médica. Te cubre cuando se rompe la cámara, se cancela el vuelo, muere un familiar y tienes que volver a casa, o si te roban algo.

Sí, es un gasto añadido. Pero siempre es mejor prevenir que lamentar.

Por desgracia, pueden ocurrir cosas malas cuando se viaja. Es cierto que estos sucesos son pocos y distantes entre sí. Pero pueden costar decenas de miles de euros si los manejas por tu cuenta. Si no estás dispuesto a pagar de tu bolsillo, contrata un seguro de viaje.

Para ayudarte a encontrar el mejor plan para ti y tu viaje, aquí tienes mi guía definitiva para elegir una buena compañía de seguros. Te mostrará cómo elegir un buen plan que te cubra en caso de que te pongas enfermo, se cancelen tus vuelos, te lesiones, te roben algo o se retrase tu viaje.

Descubre aquí las ventajas y desventajas de los seguros de viaje.

Y… ¡¡ya está!!. Es hora de emprender el viaje y divertirse.

Dirígete al aeropuerto, sube al avión (¡no olvides el pasaporte!) y disfruta de los frutos de tu trabajo. Te lo has ganado.

Si estás nervioso, no te preocupes, es normal. Estás a punto de embarcarte en una aventura increíble, y eso es un gran cambio. Sentirse ansioso, nervioso o inseguro es algo que todo viajero experimenta. Pero ya has llegado hasta aquí. Confía en tu planificación, sigue tus instintos y tendrás el viaje de tu vida. Te lo garantizamos.

Ya has visto que planificar tu próximo viaje puede ser tan sencillo como reservar un vuelo y hacer la maleta o tan complejo como reorganizar toda tu vida para ir de mochilero por el mundo para siempre.

Pero, sea cual sea la duración de tu viaje, esta lista te ayudará a mantenerte organizado y motivado mientras planeas tu viaje y sales a recorrer el mundo